La sal de Epsom, es un mineral que se extrajo por primera vez en la ciudad británica de Epsom, en 1618. Esta sal es llamada también sulfato de magnesio. Cuando a un baño de agua caliente se le agrega sal de Epsom ayuda a aliviar el dolor muscular. También se ha demostrado que reduce la inflamación muscular, disminuye el estrés, mejora la circulación, suaviza la piel y beneficia al estado de ánimo. Este mineral es absorbido eficazmente a través de la piel, proporcionando un alivio casi inmediato en dolores musculares, dolores causados por largos entrenamientos deportivos y otras actividades que causan dolor en grandes grupos musculares debido al esfuerzo excesivo.
El magnesio ayuda a producir serotonina, un químico del humor que crea una sensación de calma y relajación. Reduce la presión arterial, crea una sensación de relajación, mejora el sueño, la concentración y ayuda a los músculos y los nervios a funcionar correctamente.
Exfolia la piel muerta: mezcla una cucharada de aceite de baño o aceite de oliva y la sal y frota toda la piel húmeda para exfoliar y suavizar tu piel.
Un baño de pies con las sales epsom, los relaja y además elimina el olor y suaviza la piel. Por sus magnificas propiedades NATURAL-MENTEva ha preparado unas sales de baño especiales de SAL EPSOM y aceites esenciales, un complemento perfecto para cuidarte, relajarte y mimarte... por que nadie se lo merece más que tú.